La obra de Lorena Chaplin no necesita explicación.
Transmite una comunicación silenciosa entre el espectador y ella.
Sus mujeres nos regalan miradas, expresan sentimientos, esos sentimientos quedan muy bien expresados en cada lienzo.
Una paleta de colores tenue, definido, que no necesita de algo superfluo para atraer nuestras miradas.
Realista en temas y argumentos, realista en la aplicación de colores, en la creación de un ambiente único.
Su obra queda grabada en nuestras retinas y en nuestra alma, logrando el objetivo del arte.
No es sencillo conseguir lo que esta artista logra, con una especie de realismo muy propio, pero sin llegar nunca a los “ ismos” estos que suelen estar de moda una temporada, para luego en el santo olvido.
Realista en temas y argumentos, realista en la aplicación de los colores, en la creación de ambientes, y en la forma de estar al corriente y contemplar la realidad.